Mantener un equilibrio saludable en el suelo
El suelo sobre el que caminamos ha estado desarrollándose durante miles de años. Sostiene la vida tal como la conocemos, proporcionándonos alimento, la base para el crecimiento de las plantas y una naturaleza abundante de la que todos disfrutamos. Eso hace que el suelo sea uno de los recursos más preciados del mundo: un tesoro justo bajo nuestros pies que debemos preservar hoy para que pueda proveer para el mañana.
En los suelos sanos, convive toda una comunidad de organismos en un equilibrio armonioso. Los hongos, las bacterias, las lombrices de tierra y muchos otros organismos vivos, desempeñan un papel importante en el mantenimiento de la fertilidad de los suelos. Entre ellos se encuentran los nematodos, gusanos microscópicos que son en su mayoría beneficiosos, ya que ayudan a estimular los ciclos de nutrientes del suelo y mantienen a raya las plagas y enfermedades dañinas para las plantas.
Pero no todos los nematodos son buenos. Los nematodos fitoparásitos atacan y dañan las plantas. Pueden devastar cultivos y destruir cosechas al dañar las raíces y hacer que las plantas sean más vulnerables a enfermedades y otros factores de estrés, como las condiciones climáticas.
Reklemel™ active es un nematicida selectivo, el primero en su tipo, que se dirige a estos nematodos parásitos de las plantas, pero es suave con los organismos beneficiosos del suelo, incluidos los nematodos buenos. Esto permite a los agricultores proteger eficazmente sus cultivos del daño de los nematodos parásitos de las plantas sin alterar el equilibrio saludable de los organismos beneficiosos del suelo.