Arraigados en la salud del suelo – Nematodos
Los cultivos extraen nutrientes del suelo a través de sus raíces. Las raíces, a su vez, liberan alimentos que sirven de sustento a los organismos beneficiosos del suelo. Así funciona la red trófica del suelo.
Sin embargo, las raíces no son inmunes a las amenazas. Pueden ser destruidas por diversos factores. Una de las amenazas menos conocidas son los nematodos dañinos, que son microscópicos e irreconocibles a simple vista, pero tienen el poder de asolar un cultivo y causar importantes pérdidas de rendimiento. El control de los nematodos dañinos es esencial para mantener sanos los cultivos.
Contrariamente a lo que mucha gente piensa, el número de nematodos dañinos o malos en los suelos es fácilmente superado por el número de nematodos buenos o beneficiosos que promueven la fertilidad natural y la calidad a lo largo del tiempo.
Los nematodos beneficiosos se alimentan de bacterias, hongos, insectos o nematodos malos, estimulando los ciclos de nutrientes del suelo y manteniendo a raya las poblaciones de plagas y enfermedades perjudiciales para las plantas.
Por lo tanto, es crucial adoptar herramientas de gestión agrícola que funcionen en armonía con los nematodos beneficiosos.
¿Por qué debemos preocuparnos por la salud del suelo
Un suelo sano es la base de la productividad y la sostenibilidad de los cultivos. Cada campaña, tenemos la oportunidad de tomar medidas que ayuden a mejorar su salud, promoviendo el buen rendimiento de los cultivos y la sostenibilidad del suelo a largo plazo.
¿Cómo podemos mejorar la salud del suelo a largo plazo
Los agricultores pueden tomar varias medidas para preservar y promover la salud de sus suelos:
- Reducir al mínimo las perturbaciones adoptando prácticas como la siembra directa o el laboreo mínimo.
- Plantar cultivos de cobertura para preservar la humedad y reducir la erosión.
- Promover la biodiversidad en sus suelos, reduciendo al mínimo los insumos agrícolas, o eligiendo insumos que sean menos perjudiciales para los organismos beneficiosos del suelo.
- Cuando utilicen nematicidas, pueden seleccionar los que conserven los organismos beneficiosos y detengan los nematodos perjudiciales.
Continuar el ciclo
Un suelo sano es igual a un ecosistema en el que toda la vida puede prosperar. Un simple cambio de la mera gestión a la promoción proactiva de la salud del suelo y el reconocimiento del papel fundamental que desempeña en beneficio de las tierras de cultivo y del planeta, puede crear valor a largo plazo. Los agricultores podemos actuar hoy y dejar un legado para el futuro.