Datos del monitor de rendimiento para la toma de decisiones de manejo
Para mejorar la calidad de los mapas de rendimiento, es necesario calibrar las cosechadoras. Las vagonetas de pesada, son una herramienta perfecta, ya que permite comparar las estimaciones del monitor de rendimiento con determinaciones precisas, y así ajustarlas. Aún así, los valores de los mapas de rendimiento son estimaciones, sujetas a incertidumbre y errores, lo que limita el uso de los datos del monitor de rendimiento en términos absolutos, como por ejemplo en ensayos de variedades. El uso de vagonetas de pesada y la evaluación de otros parámetros del grano (humedad y peso específico), sigue siendo fundamental para realizar estas comparaciones. Teniendo en cuenta estas limitaciones, los mapas de rendimiento, resultan de utilidad para evaluar la producción de parcelas y explotaciones, plantear estrategias de agricultura de precisión, o evaluar ensayos agronómicos a gran escala.
Introducción
Las cosechadoras con sistemas de monitoreo de la producción llevan muchos años funcionando en Estados Unidos y en otros países del mundo, y también en España y Portugal. En Estados Unidos, ha ocurrido una adopción generalizada de estos sistemas en los últimos 20 años. En España también existen algunas en funcionamiento desde hace más de diez años. En Andalucía se estima que hay más de 20 cosechadoras equipadas con sistemas de monitoreo de la producción, así como en León y en Huesca, donde también hay varias cosechadoras en funcionamiento que están equipadas con estos sistemas.
La utilidad primaria de los sistemas de monitoreo de la producción (en adelante, monitores de rendimiento) es la evaluación de la variabilidad espacial del rendimiento dentro de una parcela o explotación. Los monitores de rendimiento no miden directamente el rendimiento (o producción por unidad de superficie), sino que estiman el rendimiento relativo en función de la tasa de flujo de masa de grano. Junto a un receptor GPS, los monitores de rendimiento proporcionan una evaluación de la variabilidad espacial del rendimiento en una superficie. Finalmente, el sistema de monitores de rendimiento y el procesado de los datos, permite la elaboración de mapas de rendimiento, y estos mapas permiten evaluar la producción en cada zona de la parcela.
La información del mapa de rendimiento se puede solapar y contrastar con mapas de rendimiento de otros años (del mismo o de otros cultivos), así como con otras informaciones espaciales de la parcela como son los mapas de elevación y orientación del terreno, mapeo de conductividad eléctrica del suelo, o imágenes de satélite o de drone durante la campaña, o mapas de productividad relativa obtenidos a partir de la secuencia de imágenes durante la campaña. Todas estas informaciones, junto con el conocimiento de la parcela del agricultor y del técnico, permiten tomar decisiones de manejo basadas en datos, y plantear de manera coherente el uso de tecnologías de agricultura de precisión, como son el abonado o la siembra a dosis variable.
Mapa de rendimiento, pixelado (izquierda) y suavizado (derecha), mostrando los diferentes niveles de rendimiento (según leyenda). Localidad, Jabares de los Oteros (León). Año: 2017. Fuente: SPIDERwebGIS®